About the Book
José Miguel Sánchez Gómez, Yoss (La Habana, 1969). Se destaca por su estética de rockero tanto como por su pasión por la ciencia y la mitología. Ha publicado los libros: Se alquila un planeta (2001); Super extragrande (2012, novela corta de ciencia ficción). Condomnautas (2018) ciencia ficción; Red Dust, (2020, ciencia ficción); Zhen-Galac (23 teselas cuadradas, 2017), es un asteroide en el centro del universo, un improbable sumidero de razas y culturas donde la antigüedad es joven y la distancia breve; Que den un paso al frente los caídos (2017); La voz del abismo (2013) y Angélica (2014). Ha sido traductor de la obra del andino Guamán Poma de Ayala (Nueva crónica y buen gobierno, 1615), del mexicano José Joaquín Fernández de Lizardi (El Periquillo Sarmiento, 1816) para la cual fue premiado por el NEA en 2001, del uruguayo Ángel Rama (Transculturación narrativa en América Latina, 1982), y de numerosas novelas y poemas cubanos y españoles.
Este libro, que reúne nueve de mis mejores historias eróticas, ya apareció, en 2019, en Ediciones Extramuros, y fue la estrella del homenaje del cual, con motivo de mi medio siglo, me hizo objeto el Centro Provincial del Libro y la Literatura de La Habana, en el Pabellón Cuba dedicándome la edición provincial de la Feria Internacional del Libro de ese año.
En aquel entonces, elegí que el título no fuera el de ninguno de los relatos porque... bueno, porque me parecía una metáfora bastante obvia, para englobar literatura erótica. Aun así, no han faltado quienes me pregunten qué quiere decir. ¿? Pobrecitos... si no se dan cuenta ellos solos.
Esa edición de Extramuros alcanzó tanta popularidad que, ahora mismo, es imposible encontrar un solo ejemplar, ni en las librerías de viejo. De hecho, ni yo mismo conservo uno: presté el que tenía... y nunca me lo devolvieron. Y como, por la rotura de dos discos duros externos, en 2021 también perdí buena parte de mis datos, tampoco conservaba la versión digital. Aunque sí los cuentos por separado, menos mal.
Así que cuando cierta amiga y editora me escribió, solicitándomela, no me quedó más que armarla de nuevo. Por eso no respondo del orden de estos relatos. Eso sí me parece que hay uno, Ana, la que me cuida, que no figuraba en la selección original. Pero, ¿Qué sentido tendría hacer una segunda edición, si todo es igual que en la primera? Aunque, claro...también podría equivocarme; la memoria es una traidorzuela encantadora. En cualquier caso, en las páginas que siguen, los lectores curiosos... y lujuriosos, encontrarán todo el catálogo de parafilias de rigor: masturbación, sadomasoquismo, voyeurismo, violaciones, zoofilia... y hasta fantasía y ciencia ficción, los géneros que más me gusta cultivar.
La mayoría han sido escritos en La Habana, Cuba. Entonces, no dicen nada, al final. Pero si los terminé en otra parte... como en Roma, donde viví entre 2000 y 2004, lo señalo. Soy un tipo ordenado... casi siempre. Por eso todos también llevan su fecha, al final. O sea... supongo que debería notarse cierta evolución escritural, entonces. Si los hubiera dispuesto en estricto orden cronológico. Cosa que no hice, por supuesto. No soy así de predecible.
El relato de ciencia ficción que abre esta especie de antología personal, de hecho, es mi re-versión de un cuento de mi amigo Vladimir Hernández, escrito a finales de los 80. Y el cuento fantástico que cierra el volumen, incluso anterior.
Así que lean mis incursiones en el erotismo... pero mejor, si pueden, háganlo sosteniendo el teléfono o el Kindle con ambas manos. Esos aparatos son caros, y nadie quiere que se les resbalen ¿no?...
